Desde casa

Cómo hacer Plastilina casera

En esta publicación les vamos a enseñar a hacer plastilina casera, o sea masa cocida hecha con crémor tártaro. Por lo que gastaríamos en una librería para medio kilo de plastilina comercial podemos hacer varios kilos en casa.

Ingredientes

2 medidas de harina (sea una tasa, un vaso, etc),
1 medida de sal
2 medidas de agua
1 cucharada de aceite
2 cucharada de crémor tártaro
color vegetal o temperas

En casa en solo 15/30 minutos podemos hacer al menos un kilo de masa para que los chicos jueguen. También les sirve a las maestras jardines para trabajar texturas con los chicos en el colegio a bajo costo.

Sabemos que la crisis en nuestro país está afectando a la gran mayoría de la población y a los chicos hay que entretenerlos con algo. Por eso hacer ésta plastilina casera (que la pueden hacer con ayuda de ellos) es muy simple y bastante accesible.

Con lo que se compra medio kilo de plastilina en una librería/juguetería, en casa por ese mismo costo podemos hace entre 2/3 kilos de plastilina casera (ya que se puede usar y recomendamos la harina y la sal más económica que consigan).

El crémor tártaro es un ácido, tradicionalmente un subproducto de la industria del vino. Se consigue en las casas de repostería. Este químico no es maligno para el ser humano y ayuda a que la plastilina sea utilizable por mucho más tiempo. Hay quienes cuentan que con ésta receta la masa les dura hasta UN AÑO. Por ese mismo motivo la utilizamos.

La sal se puede evitar, la usamos para que le de un poco de “brillo” a la masa.

Paso a paso de cómo hacer plastilina casera

En un recipiente mezclamos todos los sólidos (harina, sal y crémor tártaro).
Ponemos una olla a fuego mínimo
Agregamos el aceite y el agua en la olla
En seguida agregamos los sólidos que mezclamos previamente
Batimos todo junto durante 15 minutos aproximadamente (se va a formar un engrudo al principio, luego se va a ir evaporando el agua quedando una masa más dura)
Una vez que se genera una masa con cuerpo que se despega de la olla en casi su totalidad apagamos el fuego y dejamos enfriar la masa.
Una vez que la masa está fría la separamos en la cantidad de colores que vamos a querer hacer.
Luego amasamos bien la masa con el colorante vegetal (son unas pocas gotas nomás) hasta que quede un color uniforme.

También se puede usar tempera en lugar de colorante vegetal, pero hay que cuidar que los chicos no se coman la masa después. Igual las temperas ya suelen ser “no toxicas” (no descomponen si los chicos la consumen, pero mejor evitarlo obviamente).

Si usan el color vegetal recuerden que solo son unas gotas y que es mejor usar guantes ya que después cuesta un poco más limpiarse el color de las manos.